EL CRISTO NACERÁ
En alveolo fecundo sueñas,
sabio y paciente,
la exégesis bíblica cumplir.
Sonríe en el humilde pesebre,
disfruta del abrazo de tu madre,
regocíjate con el incienso y la mirra.
Serás infinitamente humano,
ornarán tu frente rosas de bronce,
vestirás manto de arcilla.
De olivo será la anunciada cruz,
resistirás del hombre la estocada
y manará dulce sangre de tu herida.
En cáliz lujoso se beberá,
y alborozados «In Nomine Jesus Christus»,
otras sangres se derramarán.
maria Valente