ABANDONO
Besos de piel,
libación de alientos.
(Sudario de seda exudando mixtura)
Los ojos pronuncian
discursos febriles.
Invaden la alcoba
aromas de nardos.
(La noche mira por el cristal desnudo)
Carillón sin horas,
placidez de luna.
Brota la luz difusa
del amanecer impío.
(Taja el silencio intacto un visceral gemido)
En el lado vacío del lecho,
las manos suplican consuelo.
maria Valente